DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS

Somos un grupo de jubiladas y jubilados unidos por un común afán de libertad, justicia social y democracia participativa. Nos oponemos firmemente a toda forma de exclusión o marginación, cualesquiera que sean sus motivaciones: origen, religión, género, raza, ideología, "status" social y económico, orientación sexual y, claro está, edad. Rechazamos toda forma de política autoritaria, ejercida al margen del control democrático popular y los políticos que, en nombre de la democracia y el bien común, prescinden del pueblo que dicen representar y favorecen intereses espúreos. Reivindicamos la igualdad de todos los seres humanos y el respeto incontestable a su dignidad y derechos. En tanto que ciudadanos, aspiramos al ejercicio efectivo de nuestros derechos políticos y muy particularmente al derecho de expresar libremente nuestro pensamiento sin cortapisas ni inhibiciones. El blog responde a esta aspiración y, consecuentes con esta declaración de principios, se encuentra abierto a cuantas personas deseen expresar sus opiniones en estas páginas. Esperamos vuestra colaboración.

lunes, 21 de mayo de 2012

¡VAYA CUADRILLA!

El 16 de octubre pasado publiqué en este mismo blog una entrada con el título ¿sirven para algo los programas electorales? Ya en aquella ocasión la conclusión a la que llegaba, repasando la actuación de los diferentes gobiernos hasta aquel momento, era que las promesas realizadas por los partidos en sus programas electorales no servían para nada. No me extiendo más sobre lo que decía, pues quien quiera puede leerlo en este blog.

En la actualidad, después de ver lo que está haciendo el gobierno del PP, las conclusiones deben ser mucho más contundentes aún, si cabe. Veamos, no solo está legislando contradiciendo absolutamente su programa y promesas electorales, sino que el Sr. Rajoy manifiesta con todo el papo que hará lo que crea necesario y bueno para España, incluso aunque hubiera dicho, no ya en la campaña electoral, sino unos días antes que no lo haría. ¡Joder, eso sí que es chulería! Claro que eso es lo que está haciendo desde un principio. Tampoco me extiendo más en esto ya que el PSOE sacó hace ya un tiempo un video con las mentiras del PP (por cierto, podían haber aprovechado y haber hecho un hueco para sacar también sus mentiras, que, en efecto, no son tantas ni tan groseras, pero también su comportamiento deja a las claras el poco respeto por cumplir sus promesas electorales)

Supongo que el Presidente del Gobierno conocerá lo que dice la Constitución Española en su título preliminar, artículo 1.2: La soberanía popular reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado; asimismo supongo que es consciente que se está pasando la Constitución por ahí. Habría que recordarle, sin embargo, que el pueblo soberano no entrega en las elecciones generales su soberanía al gobierno de turno, ni siquiera al parlamento, para volver a cogerla a los cuatro años. No, el pueblo mantiene su soberanía durante los 365 días del año y lo que hace es otorgar a determinadas personas su representación para que legislen en su nombre en base a unos compromisos adquiridos por los partidos políticos en sus promesas electorales. No les entrega un cheque en blanco. En cualquier caso, a mi modo de ver, lo que hacen los partidos políticos cuando legislan contradiciendo las promesas efectuadas al pueblo soberano es vulnerar el espíritu y la letra de la Constitución en su artículo 1.2 y como tal debería de ser penalizado.

Se puede alegar, y con razón, que en un programa electoral para gobernar cuatro años es imposible recoger todas las vicisitudes por las que va a atravesar el país en el transcurso de esos años y, consecuentemente, esto se deberá de tener en cuenta y permitir cierto margen de maniobra de actuación. Cierto. Pero en el caso que nos ocupa en concreto, la situación por la que atravesaba nuestro país -la crisis se inició en 2007, aunque algunos se enteraron bastante más tarde- era sobradamente conocida por el PP, por más que ahora se eche mano de la famosa herencia, y, aun así, se dijo, y de forma solemne, que no se tocarían las pensiones, ni la sanidad, ni la enseñanza… Se ha hecho todo lo contrario de lo que se anunció que se iba a hacer. No se puede alcanzar mayores cotas de traición al pueblo soberano y de mezquindad.

Antes de realizar unos recortes de la envergadura como los que se han realizado en sectores tan fundamentales como la sanidad y la enseñanza, que son, por otra parte, los sectores que más inciden en las clases más desfavorecidas, ¿es tan descabellado pensar en la convocatoria de un referéndum para que el pueblo soberano decida en qué sectores se debe de reducir gastos o de qué fuentes se procuran más ingresos para poder mantener esos gastos? El coste, por ejemplo, sería bastante menor que el que nos gastamos en las campañas electorales. Yo me pregunto: ¿Por qué los partidos políticos durante la campaña electoral nos tratan, y lo expresan abiertamente, de sociedad madura, democrática, inteligente, formada… y una vez en el poder nos tratan como una sociedad de descerebrados, de inútiles, de ignorantes…?

En fin, a mi modo de ver, tal como se va profundizando en robar al pueblo su soberanía, sería necesario y urgente que se apruebe una ley en la que se establezca que ningún partido político, es decir, los representantes del pueblo soberano, puedan adoptar medidas que no estuvieran contempladas en su programas electorales, y en caso de tener que adoptar medidas de extrema gravedad y urgencia no recogidas en ellos, que sea obligatorio convocar un referéndum para que la ciudadanía, el pueblo soberano, decida al respecto. De lo contrario, para no asistir a esta falta de respeto y maltrato que nos infligen, lo mejor que podíamos hacer es eliminar las campañas electorales, que nos cuestan un montón de millones de euros a la ciudadanía española. Así al menos harían lo que les dé la gana, pero sin mofa, sin cachondeo, sin escarnio.

Nos vemos mañana en la manifestación en defensa de la enseñanza pública. En Madrid a las 18,30 h. de Neptuno a Sevilla.

Abrazos y achuchones.


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